Siempre digo a mis parejas que una de las cosas que más disfruto haciendo son las fotos de preboda. No siempre las bodas vienen acompañadas de sesiones de pareja antes de la boda, pero es una de las sesiones que más me gusta hacer, porque los protagonistas no tienen ningún tipo de tensión, solo hay que disfrutar del rato y ser ellos mismos.
Normalmente aconsejo a las parejas sobre como vestir o los lugares donde podemos hacer las fotos, pero me encanta que las parejas me propongan sitios nuevos para hacer la sesión, y hacer fotos en lugares donde no he estado antes sin duda siempre es un plus de ganas para ser el fotógrafo de su preboda.
Uno de los lugares favoritos par hacer una sesión preboda en la playa, y hasta este rincón del sur de España nos vinimos para casi ver amanecer y disfrutar de la primera luz del día.
Sin duda una sesión muy divertida donde su pequeño también quería ser parte de la sesión y cómo no muy protagonista para risa de todos.
